La fisioterapia aplicada al tratamiento de la artritis es una herramienta fundamental para evitar la pérdida de movilidad en las articulaciones durante los períodos agudos de esta enfermedad.
Esta es una de las principales conclusiones de la jornada que el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm) y la Coordinadora Nacional de Artritis (ConArtritis) organizaron este domingo, en el marco de la carrera ‘Madrid corre por Madrid’, coincidiendo con la celebración del Día de la Fisioterapia en la región madrileña. Durante el encuentro, inaugurado por el decano del CPFCM, José Antonio Martín Urrialde, y el presidente de ConArtritis, Antonio Torralba, se presentó un vídeo de sensibilización que pretende explicar qué es la artritis y cómo combatirla. La artritis reumatoide es una enfermedad crónica autoinmune que causa la inflamación de la membrana sinovial de las articulaciones (la que cubre los cartílagos), causando dolor, hinchazón, sensación de rigidez y pérdida de la movilidad articular. Para Antonio Torralba es imprescindible «movilizar las articulaciones y dotarlas de flexibilidad para no perder la movilidad en cada brote». En este sentido, destacó el trabajo que realizan los fisioterapeutas en pro de los pacientes con artritis. «Su técnica va mucho más allá de un simple masaje», aseguró.
Por su parte, José Antonio Martín Urrialde insistió en que la fisioterapia actúa como una herramienta fundamental en los períodos agudos de esta enfermedad, al tiempo que incidió en la necesidad de mantener una estrecha colaboración entre los fisioterapeutas y los pacientes de artritis para que ésta deje de ser «una patología oculta». La jornada contó, además, con la participación del reumatólogo del Hospital 12 Octubre de Madrid Javier García, el fisioterapeuta y profesor de la Universidad San Pablo CEU, Francisco García-Muro, y la profesora de danza y paciente de artritis reumatoide, Marieta Álvarez, que ofrecieron sus distintas visiones sobre el abordaje de esta patología.
El reumatólogo Javier García detalló que se trata de una enfermedad inflamatoria crónica que cursa en brotes, cuya falta de tratamiento «conduce a la destrucción articular, generando menoscabo funcional y discapacidad». Según explicó, su origen es desconocido, aunque tiene un componente genético y ambiental que puede influir en su desarrollo. La actividad física, tal y como señaló Francisco García-Muro, es fundamental para atenuar el dolor y mejorar la calidad de vida de los enfermos de artritis. En su opinión, ha de ser un ejercicio terapéutico planificado, en el que el paciente «aprenda a escuchar a su propio cuerpo y sea capaz de superar sus límites de forma segura». «Hay que moverse incluso en el peor de los momentos», concluyó. Este fue precisamente el ejemplo de Marieta Álvarez, profesora de ballet clásico y flamenco que lleva 16 años conviviendo con la enfermedad. Ella, que sufre rigidez en muñecas y tobillos, apuntó que hacer ejercicio a diario es importante para evitar que se atrofien las articulaciones.